Después de más o menos 1 mes de uso puedo decir con total seguridad que el agua micelar NO sirve para pieles secas como la mía, aunque el envase diga para TODO TIPO DE PIEL. Es como lavarse la cara con jabón, te quita la poca grasa que tienes en el rostro y terminas con la cara tiesa como un cartón.
Al principio parecía que me ayudaba porque sentía que quedaba muy suave y fresca pero con el paso de los días, la piel se fue resecando cada vez más y perdiendo todo rastro de humectación.
Todo comenzó debido a lo DIFÍCIL que es encontrar una BUENA CREMA DE LIMPIEZA hoy en día... Tengo una regalona, pero por esas extrañas cosas del mercado, igual como sucede con los bloqueadores solares que “desaparecen” en Invierno o en el mejor de los casos te ofrecen de una sola marca y mala, ésta crema va y viene como la marea.
Hay períodos que te cuentan que se descontinuó, que ya no hay más, que uses la de turno y bla, bla... Después con los meses, vas por un jabón y resulta que la encuentras flamante otra vez en las estanterías. La explicación... No, es que ahora llegó. PLOP!!
Como mi crema se encuentra en esos períodos en que hace su acto de desaparición, una señora muy amable me convenció de las maravillas de las aguas micelares... "porque son lo mejor para retirar impurezas, células muertas y demases... porque son lo que se viene ahora debido a su fácil uso, sólo untas tu rostro con un algodón con menjunje y te quedas así tan pancha hasta que se seque..."
Igual me pregunté cómo retiraría las impurezas, si sólo "ungüentas" tu cara y no quitas los restos con un papel como lo haces con las cremas o leches de limpiezas, donde SI NOTAS que la mugre queda pegada al papel... pero lo contó tan bonito y en colores que se la compré toda. Me llevé el “Agua Micelar de Garnier todo en 1” que prometía dejarme bella, bella...
La diferencia en precio no era mucha en comparación con mi habitual crema de limpieza, sobre todo que el formato “Maxi” estaba en ese momento a un conveniente precio de “desaste de todo eso pronto porque ocupa lugar en el estante...”
Así fue como me fui feliz con mi compra hasta que se transformó en un completo desastre... yo porfiadamente la seguí usando pese a notar que la textura de mi piel CAMBIÓ y para compensar, como sentía la cara tirante, me echaba MÁS crema de lo habitual lo que dejó como resultado un montón de espinillas, Paff!!
Al principio parecía que me ayudaba porque sentía que quedaba muy suave y fresca pero con el paso de los días, la piel se fue resecando cada vez más y perdiendo todo rastro de humectación.
Todo comenzó debido a lo DIFÍCIL que es encontrar una BUENA CREMA DE LIMPIEZA hoy en día... Tengo una regalona, pero por esas extrañas cosas del mercado, igual como sucede con los bloqueadores solares que “desaparecen” en Invierno o en el mejor de los casos te ofrecen de una sola marca y mala, ésta crema va y viene como la marea.
Hay períodos que te cuentan que se descontinuó, que ya no hay más, que uses la de turno y bla, bla... Después con los meses, vas por un jabón y resulta que la encuentras flamante otra vez en las estanterías. La explicación... No, es que ahora llegó. PLOP!!
Como mi crema se encuentra en esos períodos en que hace su acto de desaparición, una señora muy amable me convenció de las maravillas de las aguas micelares... "porque son lo mejor para retirar impurezas, células muertas y demases... porque son lo que se viene ahora debido a su fácil uso, sólo untas tu rostro con un algodón con menjunje y te quedas así tan pancha hasta que se seque..."
Igual me pregunté cómo retiraría las impurezas, si sólo "ungüentas" tu cara y no quitas los restos con un papel como lo haces con las cremas o leches de limpiezas, donde SI NOTAS que la mugre queda pegada al papel... pero lo contó tan bonito y en colores que se la compré toda. Me llevé el “Agua Micelar de Garnier todo en 1” que prometía dejarme bella, bella...
La diferencia en precio no era mucha en comparación con mi habitual crema de limpieza, sobre todo que el formato “Maxi” estaba en ese momento a un conveniente precio de “desaste de todo eso pronto porque ocupa lugar en el estante...”
Así fue como me fui feliz con mi compra hasta que se transformó en un completo desastre... yo porfiadamente la seguí usando pese a notar que la textura de mi piel CAMBIÓ y para compensar, como sentía la cara tirante, me echaba MÁS crema de lo habitual lo que dejó como resultado un montón de espinillas, Paff!!
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